jueves, 5 de abril de 2012

Pepe Luí: El Desenlace

Después de que llegara el vecino, nos quedamos tranquilos, hasta que, un rato después, volvió y nos dijo que Pepe Luí estaba ciego y, por culpa de eso, hambriento. Pasan los días y no tengo noticia de si sigue con nosotros. Pero prefiero no saberlo, para así poder pensar que está bien.

4 comentarios:

  1. Me entristece lo que le pasa a Pepe Luí. También prefiero pensar que la naturaleza encontrará el mejor camino para él.

    Besitos

    ResponderEliminar
  2. Pobrecillo pájaro. Hiciste lo mejor que podía hacerse. Ojalá haya sobrevivido.
    saludillos.

    ResponderEliminar
  3. No querer saber cómo está te da la posibilidad de pensar que se está recuperando. Creo que es un acierto, dado que hiciste todo lo que pudiste por él.

    saludos chaval.

    ResponderEliminar
  4. Ya. Ahora mismo me alegro por él.

    Saludicos a los tres.

    ResponderEliminar